Día Mundial del Retrete. Hacer visible el recurso invisible

Día Mundial del Retrete. Hacer visible el recurso invisible

Desde 2013, Naciones Unidas ha puesto el foco cada 19 de noviembre, en los retretes. Al hablar del acceso al saneamiento, las cifras que se manejan muestran el gran camino que falta por recorrer. Actualmente, según la información que recoge Naciones Unidas, “existen 3.600 millones de personas viven sin acceso a un saneamiento de forma segura”.

Una meta que recoge explícitamente el ODS 6 ‘Agua limpia y saneamiento para todos’ en su segundo epígrafe que dicta: “De aquí a 2030, lograr el acceso a servicios de saneamiento e higiene adecuados y equitativos para todos y poner fin a la defecación al aire libre, prestando especial atención a las necesidades de las mujeres y las niñas y las personas en situaciones de vulnerabilidad”.

Bajo este objetivo, se da visibilidad a los problemas derivados de la falta de un sistema sanitario adecuado que permita, a todas las personas del mundo, poder realizar acciones que, muchas veces, se dan por hecho. Pero no debería ser así.  

Casi la mitad de la población mundial carece de retretes. De saneamiento gestionado de forma segura. Una situación de vulnerabilidad que impide realizar las necesidades básicas sin contaminar las fuentes de agua potable, los campos, los cultivos, los ríos y mares. Una falta de derechos humanos que sea garante de salud para millones de personas en el mundo.

Aún, en este momento, encontramos a 7.600 niños menores de 5 años que mueren anualmente por enfermedades diarreicas. Siendo, por ejemplo, Haití, el país de que cuenta con un porcentaje más alto de defunciones en menores llegando al 23% de número total. Situación provocada por la defecación al aire libre a la que, aún millones de personas, tienen que recurrir por falta de retretes.

Trabajar y apostar por aumentar las instalaciones de saneamiento en estos países repercutirá en una disminución de la mortandad, en la reducción de enfermedades y garantizar los derechos humanos en los países menos adelantados.

Bajo el lema ‘Hacer visible el recurso invisible’ se inicia una nueva campaña en 2022 en la que se pone de manifiesto la necesidad de que los gobiernos, adopten las medidas necesarias para garantizar el acceso a los retretes, y para que formen parte de sus políticas ya que suponen un imprescindible para el desarrollo sostenible y el futuro de las poblaciones.

El Día Mundial de Retrete reivindica, una vez más, la falta de garantías al hablar de acceso al saneamiento. Unas carencias que, además, inciden de forma directa en otros Objetivos de Desarrollo Sostenible, acentuando, entre otros, el reto de la igualdad de género. Conforme a los datos ofrecidos por UNWOMEN, en el 80 por ciento de los hogares que carecen de saneamiento, son las mujeres y las niñas las encargadas de recorrer largas distancias para poder recoger el agua para sus familias o pueblos.

Sin embargo, a pesar de que las metas son claras, alcanzar las metas propuestas para garantizar el acceso al agua y saneamiento a todas las personas en el Planeta para 2030, parece no ser realista. Por ello, es necesario fomentar las alianzas internacionales, siguiendo la propuesta de Naciones Unidas en su ODS 17 ‘Revitalizar la Alianza Mundial para el Desarrollo Sostenible’ para que, de forma conjunta, se pueda progresar en el logro indispensable para la vida que es el ODS 6 ‘Agua y saneamiento para todos y todas’.

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