La lucha del medioambiente contra los plásticos en un año determinante
El cambio climático nos está dejando algunas imágenes de lo más impactante. Grandes lagunas secas, glaciares que se rompen ante la subida de las temperaturas, bosques con tonos cada vez más marrones y, ante la aparentemente lenta y diversa transformación del Planeta, nos encontramos con un factor común en todos los rincones de La Tierra: los plásticos.
La pasada semana, varios diarios informaban sobre la existencia «50 toneladas de residuos solo en el Everest». Una basura que ha comenzado a mostrarse tras años bajo la nieve por el ascenso de las temperaturas. Tiendas de campaña, bombonas de oxígeno, latas… Todos los residuos que los alpinistas han ido dejando en sus excursiones a un lugar que hasta hace poco tiempo se consideraba como ‘virgen’.
Los plásticos, presentes en los puntos más inhóspitos, nos acompañarán durante años en nuestras vidas por lo que, este 5 de junio de 2023, es hora de pasar a la acción.
Hoy, Día Mundial del Medioambiente, el lema persigue la concienciación de todos para frenar esta contaminación. «Sin contaminación por plásticos», es el objetivo de esta efeméride en este año.
La solución la tenemos a nuestro alcance, desde la ONU informan que gracias a los avances científicos podríamos resolver este problema con cierta celeridad dando lugar a una restauración de los ecosistemas.
Durante estos días, casi 200 países debaten en París como poner freno a la contaminación por plásticos. Gobiernos, industria y sociedad civil buscan alcanzar un tratado por el que el plástico pueda reducirse de cara a próximos años.
Hemos llegado a los límites que puede soportar la tierra en cuestión de este tipo de contaminación por ello, es imprescindible pasar la acción y buscar alternativas eficientes a este consumo que, en este momento, pone en riesgo la economía, la sociedad, la sanidad, la naturaleza y la biodiversidad.
El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) advierte de que nos encontramos ante una verdadera «crisis global» que debemos afrontar de forma coordinada, transversal y rápida para poder frenar de forma contundente la cantidad de desechos plásticos con los que contamos en la actualidad. «Alrededor de 7.000 millones de los 9.200 millones de toneladas de plásticos producidas entre 1950 y 2017 se han convertido en residuos plásticos», informa la organización.
El compromiso de los gobiernos es imprescindible para desarrollar cambios legislativos e industriales para reducir la contaminación por plásticos. Se estima que el problema avanza a un ritmo de 430 toneladas al año. Si seguimos así, la industria de los plásticos emitirá 56.000 millones de toneladas de CO2 de aquí a 2050.
Las claves del cambio
Con el objetivo de reducir la contaminación por plástico en la cadena alimentaria, en esta cumbre mundial se está valorando eliminar los plásticos de un solo uso, los envases que contengan sustancias tóxicas, imponer un impuesto mundial a los plásticos… Pero, además, desde nuestras casas también podemos asumir el reto con sencillos gestos:
- Evitar los plásticos de un solo uso.
- Ir a la compra con una bolsa reutilizable o de tela.
- Compra alimentos que no vengan empaquetados en plástico o productos a granel.
- Sustituye los tuppers de plástico por los de cristal o acero inoxidable.
- Deposita los plásticos en el contenedor de reciclaje correspondiente.
- Evita los productos que contengan microplásticos y elige los materiales biodegradables.
- Dale una segunda oportunidad a los envases y apuesta por la reutilización.
Comparte y crea conciencia.
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